Los dispositivos móviles y especialmente los smartphones han cambiado nuestras vidas, no solo han abierto posibilidades totalmente nuevas en el mundo digital, sino que han permitido reinventar los procesos del mundo físico de muchas industrias tradicionales. De hecho, vivimos en una sociedad cada vez más interconectada, por lo que los sistemas de pago digitales ya son algo cotidiano. Los datos hablan por sí solos: a finales de 2022, el 66% de los pequeños comercios en España -bares y restaurantes incluidos- aceptan pagos digitales.
Efectivamente, la transformación digital ha marcado un antes y un después en nuestras vidas. Además, la pandemia aceleró esta digitalización en muchos ámbitos, como en el de la restauración y la hostelería. Por ejemplo, ya a nadie le extraña no ver la carta física en los restaurantes, sino consultar la carta y el menú del día leyendo un código QR, o pagar cualquier transacción comercial con el móvil, ni siquiera con una tarjeta bancaria.
Precisamente, en el ámbito de la restauración, el proceso de digitalización está yendo mucho más rápido que en otros. Así, por ejemplo, los clientes ya pueden, mediante su smartphone, no solo ver la carta de especialidades de un restaurante, pagar la cuenta que un camarero le pueda traer al finalizar su comida o su cena, sino incluso, hacer su pedido y pagar sin haber tenido contacto alguno con ninguna persona.
En España, ya hay varios sistemas que funcionan en este sentido. Aplicaciones que agilizan el servicio, y que pueden satisfacer aún más al comensal, que no tiene que esperar ni un minuto para que le puedan traer la cuenta y pagar. Pero no solo satisface al comensal. El hostelero verá a sus clientes más satisfechos y, por tanto, también optimizará procesos, agilizando el servicio en sala pudiendo, incluso, llenar de nuevo las mesas, doblando servicios.
En definitiva, la digitalización de la hostelería está permitiendo una mayor eficiencia y rentabilidad en los restaurantes. El pago en efectivo ya es agua pasada. Se está quedando obsoleto y, en respuesta a la demanda de soluciones digitales, cada vez más van surgiendo nuevos sistemas de pago digitales que permiten a los comensales pagar de forma segura y cómoda a través del móvil.
Qué ventajas hay en su uso
En el mercado existen muchos sistemas y nuevas Apps que agilizan los tiempos de espera en un restaurante. Básicamente, la mayoría funciona de la misma manera, exceptuando algunos detalles. Veamos aquí algunas de las ventajas que ofrecen.
- Estos sistemas permiten a los clientes pedir y pagar la cuenta directamente desde sus dispositivos móviles y smartphones, mejorando su experiencia en el restaurante. Así, con el camarero simplemente tendrá que preguntar dudas o pedir explicaciones más específicas de aquello que quieren pedir.
- Al digitalizar el proceso de pedir la comida y pagar la cuenta, se reducen los tiempos de espera y facilita la operativa a los trabajadores. Pero también es una gran ventaja para los clientes, ya que no tienen que esperar a que aparezca el personal de sala para realizar su pedido.
- Los pedidos y pagos automáticos incentivan la rotación de mesas y aumentan el ticket medio al ser más fácil pedir. Por lo que para el restaurador y hostelero son todo ventajas.
- Muchos de estos sistemas, al estar integrados en el software de reservas, proporcionan un mayor control y seguimiento del consumo en sala, para que el hostelero pueda identificar áreas de mejora y optimizar procesos.
- Los clientes disfrutan de un servicio más ágil y se sienten más seguros y motivados para pedir al tener un control total de su cuenta.
Cómo funcionan estos sistemas de digitalización
El funcionamiento tanto para el comensal como para el hostelero en su gestión suele ser muy fácil.
Así, cuando el comensal se siente en su mesa, puede acceder con su smartphone a la web vinculada a su mesa. La mayoría de estas Apps permiten acceder a la carta sin necesidad de registrarse en ninguna plataforma.
Para acceder es tan sencillo como escanear un código QR que estará en la mesa.
Los sistemas que, además, están integrados con el software de reservas, tienen aún más ventajas, puesto que el comensal puede recibir una notificación SMS o email cuando llega a su mesa. Un mensaje dándole la bienvenida y con el enlace a la carta para que empiece a pedir.
Cuando se hace el pedido, en cocina se recibe directamente, y de forma automática, por lo que se agilizan los tiempos. Así, el camarero solo tendrá que ir sirviendo en orden.
Finalmente, una vez la mesa decide que ya no va a pedir nada más, desde la App se pide la cuenta y se abona directamente desde el móvil, sin retrasos ni esperas. El comensal, eso sí, tendrá muchas posibilidades a la hora de pagar la cuenta:
- Tarjeta bancaria
- Google Pay
- Apple Pay
- Dividir el pago en varias partes, algo muy útil en caso de cenas de grupo.